La aMisTaD

¿Qué es la amistad? Según el diccionario, es una relación interpersonal de afecto entre seres humanos. Según yo... más o menos... Comenzaré diciendo que la amistad va cambiando de significado según pasan los años. Cuando tenemos entre 3 y 7 años, los amigos son los niños que se sientan en la misma mesa que tú en clase, con los que pintas, juegas con plastelina y te echas la siesta en la alfombra. No sabemos casi nada de ellos, sólo que están ahi, porque van al "cole" como tú. Cuando tenemos entre 7 y 10 o 11 años, los amigos siguen siendo compañeros de clase, aunque en esta edad, amplías el número y sabes algo más de sus vidas. Pero sigues limitandote a eso, a jugar con ellos en el "cole", a ir a jugar a su casa (si las madres se conocen) y en los ultimos años de esta etapa, quizá a salir a alguna plaza cercana. No les has elegido entre muchos candidatos, no preferiste quedarte con ellos en lugar de con otros, simplemente son los que estaban ahí, delante de ti. A partir de esta edad, hasta los 14, 15, 16... (dependiendo de la madurez de las personas), los amigos pueden seguir siendo algunos de clase, pero también comenzamos a relacionarnos con otras personas voluntariamente, porque nosotros lo elegimos y no porque sean de clase o porque nuestra madre nos lleve al parque a jugar con ellos. Y comenzamos a darles importancia, tanta, que muchos olvidan la importancia de su familia. Comenzamos a creer que son fantásticos, que podemos hacer todo con ellos, que podemos contarles todo y que nunca nos van a fallar. O quizá ésto último no lo pensamos porque quizá nisiquiera barajamos la posibilidad de que nos fallen. Comenzamos a creer que tenemos un montón de amigos, pero en verdad, y aunque en esa época lo creemos, no confiamos en la mayoría totalmente. Y pasa el tiempo... al llegar a los 18 sueles haber recibido ya bastantes palos, te suele haber engañado bastante gente, sueles haberte decepcionado de otra tanta y ya distingues entre amigos y colegas. Es más, algunos hasta distinguimos entre amigos a los que se les puede contar bastantes cosas, y amigos a los que se les puede contar TODO. Y entonces nos damos cuenta de que no tenemos muchos amigos como unos años atrás creíamos, sino que más bien se pueden contar con los dedos... Además muchos de los caminos se separan, novios/as, universidad, trabajo, tiempo libre... todo afecta, pero hay que saber convivir con ello. Cuando tenemos un amigo al cual podemos contar TODO, (y con esto no digo que tengamos que contar todo, cada uno tiene sus cosas, sino que podamos hacerlo sin que nos vaya a juzgar si no lo hacemos nosotros mismos), entonces no nos importan los caminos porque sabemos que está ahí. Si no le viesemos en un mes, seguiriamos sabiendo que está ahí. Hay que tener claro que la vida pasa, y sobre todo que la vida sigue. Y, ¿que más podemos hacer que aceptar el camino de quienes queremos? Creo que es suficiente con de vez en cuando caminar a su lado. A partir de aquí, no puedo hablar más por experiencia propia, pues apenas ni he cumplido aún 18 años, pero confío en las personas que dicen que los amigos que te quedan a los 23, son los amigos de verdad...